La Culpa es de la Iglesia

– Mataron 49 homosexuales en un bar gay….. ahh es culpa de la Iglesia!!!

– Pero los mató un hombre musulmán…… no importa, es culpa de la Iglesia!!!

– Pero el Estado Islámico se atribuyó el atentado……. no importa, es culpa de la Iglesia!!!!

– Pero el asesino era homosexual….. no importa, es culpa de la Iglesia!!!!

– Pero la Iglesia no aprobó ese atentado, incluso un pastor protestante pidió que los hubieran matado a todos…… no importa, es culpa de la Iglesia!!!!

Esto ha sido el bombardeo al respecto de este tema. Por más que los hechos apuntan a que la Iglesia Católica no aprueba este tipo de actos criminales ni ha justificado ni promovido esto, para los grupos del Lobbby gays y muchos medios, la Iglesia es culpable del atentado. Claro, es más fácil culpar a la Iglesia, que buscar a los verdaderos culpables, ya que estos sí toman represalias y usan la violencia para imponerse.

Por eso es bueno recordar lo que la Iglesia enseña en el Catecismo respecto a los homosexuales:

2357 La homosexualidad designa las relaciones entre hombres o mujeres que experimentan una atracción sexual, exclusiva o predominante, hacia personas del mismo sexo. Reviste formas muy variadas a través de los siglos y las culturas. Su origen psíquico permanece en gran medida inexplicado. Apoyándose en la Sagrada Escritura que los presenta como depravaciones graves (cf Gn 19, 1-29; Rm 1, 24-27; 1 Co 6, 10; 1 Tm 1, 10), la Tradición ha declarado siempre que “los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados” (Congregación para la Doctrina de la Fe, Decl. Persona humana, 8). Son contrarios a la ley natural. Cierran el acto sexual al don de la vida. No proceden de una verdadera complementariedad afectiva y sexual. No pueden recibir aprobación en ningún caso.

 

2358 Un número apreciable de hombres y mujeres presentan tendencias homosexuales profundamente arraigadas. Esta inclinación, objetivamente desordenada, constituye para la mayoría de ellos una auténtica prueba. Deben ser acogidos con respeto, compasión y delicadeza. Se evitará, respecto a ellos, todo signo de discriminación injusta. Estas personas están llamadas a realizar la voluntad de Dios en su vida, y, si son cristianas, a unir al sacrificio de la cruz del Señor las dificultades que pueden encontrar a causa de su condición.

 

2359 Las personas homosexuales están llamadas a la castidad. Mediante virtudes de dominio de sí mismo que eduquen la libertad interior, y a veces mediante el apoyo de una amistad desinteresada, de la oración y la gracia sacramental, pueden y deben acercarse gradual y resueltamente a la perfección cristiana.

¿Que podemos concluir?

– Que la Iglesia llama pecado a las RELACIONES O ACTOS que se realicen, no porque la persona tenga tendencia la está condenando. La Iglesia condena los actos homosexuales, porque son contrarios a la naturaleza, no son abiertos a la vida, y contrarios a la complementariedad afectiva entre hombre y mujer.

– Que estamos llamados a acogerlos como personas con respeto, compasión y delicadeza. No podemos discriminarlos por su condición, con la cual muchas veces luchan y tratan de mantenerse en Dios. Pero no es correcto etiquetar de «homofóbico» a todo el que les haga ver que no estamos de acuerdo en los actos y en la legalización de ciertos derechos que quieren imponer a la fuerza mediática.

– Y que ellos están llamados a la castidad y a acercarse gradualmente a la perfección cristiana. El homosexual que quiere agradar a Dios, debe mantenerse casto, estar en gracia de Dios, y poner todos los medios necesarios para que esa conducta pueda ser sanada, y su afectividad y plena identidad ya sea masculina o femenina regresen.

 

Sin embargo, para cierto sector… la Iglesia es la culpable de la matanza.

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