En este artículo quiero abordar las razones por las que nuestra Iglesia es

Una, Santa, Católica, y Apostólica

En muchos debates con las diferentes denominaciones verán argumentos contra esos rasgos esenciales de nuestra Iglesia.

En nuestro credo decimos que creemos en la Iglesia que es Una, Santa, Católica y Apostólica. Y como toda profesión de fe, se espera que no sea solo una oración monótona que se repite como perico, sino que sea una declaración de lo que nosotros creemos, y honramos como católicos.

UNA

Nuestra Iglesia  es una, ya que Jesús solo funda una Iglesia, no las 33,000 denominaciones autollamadas “cristianas que hoy existen.  Es claro en la Escritura que Jesús edifica su Iglesia sobre Pedro (Mateo 16,18), y esta nace como Iglesia en funciones y liderazgo de Pedro en Pentecostés.

Pero es importante también traer algo de suma relevancia, es una porque sigue el modelo Trinitario

813 La Iglesia es una debido a su origen: «El modelo y principio supremo de este misterio es la unidad de un solo Dios Padre e Hijo en el Espíritu Santo, en la Trinidad de personas» (UR 2). La Iglesia es una debido a su Fundador: «Pues el mismo Hijo encarnado […] por su cruz reconcilió a todos los hombres con Dios […] restituyendo la unidad de todos en un solo pueblo y en un solo cuerpo» (GS 78, 3). La Iglesia es una debido a su «alma»: «El Espíritu Santo que habita en los creyentes y llena y gobierna a toda la Iglesia, realiza esa admirable comunión de fieles y une a todos en Cristo tan íntimamente que es el Principio de la unidad de la Iglesia» (UR 2). Por tanto, pertenece a la esencia misma de la Iglesia ser una:

«¡Qué sorprendente misterio! Hay un solo Padre del universo, un solo Logos del universo y también un solo Espíritu Santo, idéntico en todas partes; hay también una sola virgen hecha madre, y me gusta llamarla Iglesia» (Clemente de Alejandría, Paedagogus 1, 6, 42).

Desde el inicio de la Iglesia conforme los Apóstoles y sus discípulos van avanzando en la Evangelización, se enfrentan a una diversidad cultural en las diferentes regiones. A pesar de ello vemos a una Iglesia que consta de estos tres vínculos de unidad

— la profesión de una misma fe recibida de los Apóstoles;

— la celebración común del culto divino, sobre todo de los sacramentos;

— la sucesión apostólica por el sacramento del orden, que conserva la concordia fraterna de la familia de Dios (cf UR 2; LG 14; CIC, can. 205).

Jesús anticipo que habría divisiones y por ello llama a la unidad. Juan 17,21 Que todos sean uno: como tú, Padre, estás en mí y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros, para que el mundo crea que tú me enviaste

Desde siempre, desde el inicio hubo herejías, desde el principio hubo división, pero Jesús prometió que “ni las puertas del infierno podrán contra de ella” y se ha mantenido solida y firme.

Quiero listar aquí algunas herejías que existieron en la Iglesia primitiva, verán que algunas se están repitiendo hoy

Sectas en la Iglesia Primitiva

Docetismo (70 – 170 d.C.)

Quiere decir “lo que aparece”. Según esta creencia, Jesús no tenía un cuerpo humano entonces no era humano. Su humanidad era una ilusión porque Jesús era sólo divino.

Ebionismo (70 – 325 d.C.)

Según esta creencia, Jesús recibió el Espíritu de Dios cuando se fue bautizado por Juan en el rió Jordán. Entonces el Espíritu de Dios puso en él poder de lo alto para hacer la obra mesiánica. Jesús fue un hombre con un espíritu dotado.

Monarquismo Dinámico (III siglo)

Jesús en su naturaleza no era Dios. Dios existió en Jesús como el mismo existe en nosotros.

Patripasianismo (III siglo)

El Padre se encarnó, sufrió, y murió. El Padre llega a ser su propio hijo.

Modalismo-Sabelianismo (III siglo)

Existen tres modos del Padre, Hijo, y Espíritu Santo. Sólo existe un Dios y el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo no son distintos.

Arrianismo (III a IV siglo)

Jesús era menos de Dios pero más alto que el hombre. Así que fue la primera creación de Dios. Jesús era semidivino.

Apolinarianismo (IV siglo)

Jesús no tenía una mente humana. Su sitio fue reemplazado por el “Logos”. Jesús era divino pero tenía una naturaleza humana.

Nestorianismo (IV siglo) (Hiper Diofisicismo)

Jesús era humano y divino y estas esencias eran separadas. Jesús tenía dos naturalezas que consistían en 2 personas. Él tenía una personalidad doble.

Eutiquianismo ( Eurychianism) (V siglo)

La naturaleza humana y divina de Jesús creo una tercera naturaleza.

Monofisitismo (Monophysitismo) (V siglo)

Jesús era de una naturaleza divina y una naturaleza humana y estas dos se formaron en una naturaleza mixta.

Pelagianismo (V siglo)

El pelagianismo recibe su nombre de Pelagio y designa una herejía del siglo quinto, que niega el pecado original y la gracia de Cristo. Por tanto cree que el ser humano puede por medio de meritos propios lograr su salvación.

Socinianismo (VI siglo)

Cristo recibió el Espíritu Santo por el bautismo. Más tarde él fue un hombre excepcional. Jesús fue un hombre divino.

Monotheletismo (VII siglo)

Cristo tenía dos naturalezas, una humana y la otra divina. Pero su voluntad era sola divina. Entonces la humanidad de Cristo era deficiente porque la faltaba una voluntad humana.

Adopcionismo (VIII siglo)

Cuando el Espíritu Santo cubrió Jesús durante su bautismo, él fue adoptado a la divinidad de Dios. Jesús era un hombre que llegó a ser Dios.

La Iglesia como Madre nuestra, siempre nos cuida, y cuando surgen herejías y ve en riesgo a la feligresía emite dogmas, sin que la emisión de estos quiera decir que se inicia con esa creencia, sino mas bien busca decir a todos los fieles cual es la Verdad Revelada, y así evitar confusiones.

SANTA

Nuestra Iglesia es sin duda Santa, y eso lo podemos afirmar por su origen divino. La funda Jesús Dios Hijo, El fue enviado por el Padre, y nos manda a su Paráclito para servir de guía cuando El no este. La Trinidad en un solo objetivo: Darle la cualidad primordial Divina a su Iglesia en la tierra. Esto resulta necesario si nos ponemos a pensar que como hombres de carne que somos no podemos tener participación divina por meritos propios, solo Dios nos puede dar esa tan indispensable participación con El. (Juan 3, 6.Lo nacido de la carne, es carne; lo nacido del Espíritu, es espíritu)

824 La Iglesia, unida a Cristo, está santificada por Él; por Él y en Él, ella también ha sido hecha santificadora. Todas las obras de la Iglesia se esfuerzan en conseguir «la santificación de los hombres en Cristo y la glorificación de Dios» (SC 10). En la Iglesia es en donde está depositada «la plenitud total de los medios de salvación» (UR 3). Es en ella donde «conseguimos la santidad por la gracia de Dios» (LG 48).

825 «La Iglesia, en efecto, ya en la tierra se caracteriza por una verdadera santidad, aunque todavía imperfecta» (LG 48). En sus miembros, la santidad perfecta está todavía por alcanzar: «Todos los cristianos, de cualquier estado o condición, están llamados cada uno por su propio camino, a la perfección de la santidad, cuyo modelo es el mismo Padre» (LG 11

Y tal vez la siguiente pregunta es: Si la Iglesia es Santa, ¿Por qué hemos visto que se han cometido terribles pecados en miembros de la Iglesia?

  

Por ejemplo, no podemos negar que los medios se encargan de recordarnos que ha habido malos sacerdotes que han cometido terribles pecados en contra de niños inocentes.

Aun cuando todos estamos de acuerdo con que la pederastia en los miembros católicos debería de ser cero, también es cierto que Jesús no nos prometió una Iglesia formada solo de santos e inmaculados. Y lo que trata Satanás es de hacer creer al mundo que la pederastia esta solo en la Iglesia Católica, nada más lejos de la verdad.

            Señor, ¿no sembraste semilla buena en tu campo? ¿Cómo es que tiene cizaña?» El les contestó: «Algún enemigo ha hecho esto.» – Mateo 13,27-28

Satanás ataca fuertemente a la Iglesia, su objetivo es destruirla, y nosotros sabemos no triunfara.

Aquí una cita de la carta que mando SS. Benedicto XVI a los Sacerdotes Irlandeses

Habéis traicionado la confianza depositada en vosotros por jóvenes inocentes y por sus padres. Debéis responder de ello ante Dios Todopoderoso y ante los tribunales debidamente constituidos.
Habéis perdido la estima de la gente de Irlanda y arrojado vergüenza y deshonor sobre vuestros semejantes.

Aquellos de vosotros que son sacerdotes han violado la santidad del sacramento del Orden, en el que Cristo mismo se hace presente en nosotros y en nuestras acciones.
Junto con el inmenso daño causado a las víctimas, un daño enorme se ha hecho a la Iglesia y a la percepción pública del sacerdocio y de la vida religiosa.

Os exhorto a examinar vuestra conciencia, a asumir la responsabilidad de los pecados que habéis cometido y a expresar con humildad vuestro pesar. El arrepentimiento sincero abre la puerta al perdón de Dios y a la gracia de la verdadera enmienda.
Debéis tratar de expiar personalmente vuestras acciones ofreciendo oraciones y penitencias por aquellos que habéis ofendido. El sacrificio redentor de Cristo tiene el poder de perdonar incluso el más grave de los pecados y extraer el bien incluso del más terrible de los males.

Al mismo tiempo, la justicia de Dios nos llama a dar cuenta de nuestras acciones sin ocultar nada. Admitid abiertamente vuestra culpa, someteos a las exigencias de la justicia, pero no desesperéis de la misericordia de Dios»

Nosotros los católicos podemos decir sin mentir que nuestra Iglesia es Santa y pecadora, Santa por su origen Divino y pecadora por los fieles que la formamos.

Aquí listo algunas de las denominaciones y sus fundadoras, por cuestiones de espacio no listare las 33,000 

 Si tú eres luterano, tu iglesia la fundó Martín Lutero, un ex-monje católico en el año 1524.

Si tú eres anglicano, tu iglesia la fundó Enrique VIII en 1534 porque el Papa no le concedió el divorcio para poder casarse con Ana Bolena.

Si tú eres presbiteriano, tu iglesia la fundó Juan Knox en Escocia en el año de 1560.

Si tú perteneces a la Iglesia Episcopaliana, esta es una rama de la iglesia de Inglaterra fundada por Samuel Seabury en las colonias de Estados Unidos en 1785.

Si tú perteneces al grupo de los Testigos de Jehová, Carlos Taze Russell inició esta secta en Pensilvania en 1879.

Si tú eres metodista, tu denominación fue organizada por J & C Wesley en Inglaterra en 1739, cuando decidió separarse de los anglicanos.

Si tu eres mormón (Santos de los Ultimos Días), Jose Smith inició este grupo en Palmyra, N.Y. en 1830.

Si tú eres bautista, los orígenes de tu denominación se remontan al año 1609 cuando a John Smith se le ocurrió fundar esta denominación.

Si tú eres unitario, Teùfilo Lindley fundó tu denominación en Londres en 1774.

Si tú eres adventista del Séptimo día, este movimiento lo inició Guillermo Miller, un granjero americano bautista. La denominación se organizó posteriormente hacia 1860.

Si tú perteneces al Ejército de Salvación, tu grupo lo comenzó Guillermo Booth en Londres en 1865.

Si tú te afilias con los de Ciencia Cristiana, tu denominación se remonta a 1879 cuando María Baker Eddy decidió que necesitábamos una nueva “religión”.

Si tú perteneces a la Iglesia Pentecostal o Asambleas de Dios, estas denominación cristianas comenzaron alrededor de 1914 en Hot Springs, Arkansas.

Si perteneces a cualquier otro grupo religioso del tipo «Evangélicos», «Iglesias de Dios», «Iglesia apostólica» o «Iglesia de Cristo», esos grupos se fundaron no hace más de cincuenta años.

Si tú eres católico, tu Iglesia la fundó Jesucristo el día de Pentecostés en el año 33. Lee: Mateo 16,18-19 y Hechos 2.

Nosotros nos sentimos unidos a todos los que se honran con el nombre de cristianos. Lee: Catecismo de la Iglesia Católica = CIC 817 ss. Precisamente porque todos los cristianos queremos la unidad, debemos cuidarnos de los que nos cortan y dividen, «los sectarios». A éstos, con la Biblia en la mano, puedes responder lo siguiente: ¡HAY UNA SOLA IGLESIA! La Iglesia Católica.

CATOLICA

¿Por qué no nos llamamos cristianos?

Me imagino más de uno de ustedes habrá escuchado a ex católicos que dicen que ahora ya no son católicos, son “cristianos”, y también algunos católicos confundidos que ven a cristianos y católicos como algo separado y distante. Un grave error que debemos de evitar.

Los católicos somos LOS cristianos, los autodenominados “cristianos” son realmente hijos de las divisiones iniciadas por los cismáticos a partir del siglo XVI, y que hoy por hoy y bajo el pretexto de la iluminación del Espíritu Santo forman una “nueva iglesia”, así hasta llegar a las miles de divisiones que vemos hoy en día.

Bueno, entonces somos cristianos, y ¿porque nos llamamos católicos?

La palabra ‘Católica’ está tomada del Griego ‘Katholicos’, la cual traducida, significa ‘Universal’. La palabra Griega fue Latinizada a ‘Catolicus’. y aunque algunos piensen no es bíblica, eso no es cierto sí que viene en la Biblia. Primero encontramos la definición de católica que es «Universal»:

Id, pues, y haced discípulos a todas las gentes bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñándoles a guardar todo lo que Yo os he mandado. Y he aquí que Yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo.»Mateo 18,19-20

Los tres ‘TODOS’ son TODA la gente, TODA verdad, TODO el tiempo, verdaderamente ‘Universal’, verdaderamente ‘Católica’.

καὶ καλέσαντες αυτοὺς παρήγγειλαν αυτοις τὸ καθόλου μὴ φθέγγεσθαι μηδὲ διδάσκειν επὶ τωονόματι του Ιησου» Hc 4,18

καθόλου Esta palabra es «Katholou» palabra griega de donde viene «católico» significa universal todo el mundo etc.

El adjetivo «católica» referente a la Iglesia aparece en la literatura Cristiana con San Ignacio de Antioquía (discípulo de San Juan), por el año 110 AD (Recordemos que la literatura recoge la tradición oral que le precede). En su carta Ad Smyr (A los Esmirniotas 8:2) dice: «Donde esté el Obispo, esté la muchedumbre así como donde está Jesucristo está la iglesia católica«.  

San Policarpo, martirizado unos 50 años después de San Ignacio, utiliza la palabra en ambos sentidos: tres veces con el significado de iglesia universal y una vez con el sentido de auténtica. Describe a San Policarpo como «Obispo de la Iglesia Católica de Esmirna.»

San Pacián de Barcelona, 375 A.D. dijo: «Cristiano es mi nombre, y católico mi apellido. El primero me denomina, mientras que el otro me instituye específicamente. De esta manera he sido identificado y registrado… Cuando somos llamados católicos, es por esta forma, que nuestro pueblo se mantiene alejado de cualquier nombre herético.« –Carta a Sympronian.

Durante las persecuciones, desde los primeros siglos, cuando preguntaban a los cristianos a qué iglesia pertenecían decían «a la católica». La Iglesia desde sus comienzos se ha llamado «cristiana» y «católica» indistintamente.

El concepto de catolicidad es desarrollado por San Cirilo de Jerusalén, quien dice:

La Iglesia es católica porque está esparcida por todo el mundo; enseña en plenitud toda la doctrina que los hombres deben conocer; trae a todos los hombres a la obediencia religiosa; es la cura universal para el pecado y posee todas las virtudes -(Catechesis 18:23).

834 Las Iglesias particulares son plenamente católicas gracias a la comunión con una de ellas: la Iglesia de Roma «que preside en la caridad» (San Ignacio de Antioquía, Epistula ad Romanos 1, 1). «Porque con esta Iglesia en razón de su origen más excelente debe necesariamente acomodarse toda Iglesia, es decir, los fieles de todas partes» (San Ireneo, Adversus haereses 3, 3, 2; citado por Concilio Vaticano I: DS 3057). «En efecto, desde la venida a nosotros del Verbo encarnado, todas las Iglesias cristianas de todas partes han tenido y tienen a la gran Iglesia que está aquí [en Roma] como única base y fundamento porque, según las mismas promesas del Salvador, las puertas del infierno no han prevalecido jamás contra ella» (San Máximo Confesor, Opuscula theologica et polemica: PG 91, 137-140).

835 «Guardémonos bien de concebir la Iglesia universal como la suma o por decirlo así, la federación de iglesias particulares. En el pensamiento del Señor es la Iglesia, universal por vocación y por misión, la que, echando sus raíces en la variedad de terrenos culturales, sociales, humanos, toma en cada parte del mundo aspectos, expresiones externas diversas» (EN 62). La rica variedad de disciplinas eclesiásticas, de ritos litúrgicos, de patrimonios teológicos y espirituales propios de las Iglesias locales «con un mismo objetivo muestra muy claramente la catolicidad de la Iglesia indivisa» (LG 23).

APOSTOLICA

Es Apostólica ya que es por los Apóstoles por quienes predicaron el Evangelio y a su vez los discípulos de estos lo hicieron por generaciones, esto siempre se dio dentro de la Iglesia

Hay autodenominados “cristianos” que dicen serlo sin asistir a una Iglesia, y niegan que es por la Iglesia católica que saben de Jesús. La realidad es que sin esa sucesión apostólica no sabríamos del Evangelio, ya que Jesús no está más aquí en cuerpo humano para poder decirnos la revelación.

857 La Iglesia es apostólica porque está fundada sobre los apóstoles, y esto en un triple sentido:

— fue y permanece edificada sobre «el fundamento de los Apóstoles» (Ef 2, 20; Hch 21, 14), testigos escogidos y enviados en misión por el mismo Cristo (cf. Mt 28, 16-20; Hch 1, 8; 1 Co 9, 1; 15, 7-8; Ga 1, l; etc.).

— guarda y transmite, con la ayuda del Espíritu Santo que habita en ella, la enseñanza (cf. Hch 2, 42), el buen depósito, las sanas palabras oídas a los Apóstoles (cf 2 Tm 1, 13-14).

— sigue siendo enseñada, santificada y dirigida por los Apóstoles hasta la vuelta de Cristo gracias a aquellos que les suceden en su ministerio pastoral: el colegio de los obispos, «al que asisten los presbíteros juntamente con el sucesor de Pedro y Sumo Pastor de la Iglesia» (AG 5):

«Porque no abandonas nunca a tu rebaño, sino que, por medio de los santos pastores, lo proteges y conservas, y quieres que tenga siempre por guía la palabra de aquellos mismos pastores a quienes tu Hijo dio la misión de anunciar el Evangelio (Prefacio de los Apóstoles I: Misal Romano).

Los obispos son los sucesores de los Apóstoles,

861 «Para que continuase después de su muerte la misión a ellos confiada, [los Apóstoles] encargaron mediante una especie de testamento a sus colaboradores más inmediatos que terminaran y consolidaran la obra que ellos empezaron. Les encomendaron que cuidaran de todo el rebaño en el que el Espíritu Santo les había puesto para ser los pastores de la Iglesia de Dios. Nombraron, por tanto, de esta manera a algunos varones y luego dispusieron que, después de su muerte, otros hombres probados les sucedieran en el ministerio» (LG 20; cf. San Clemente Romano, Epistula ad Corinthios, 42, 4).

Aquí dejo cartas hechas por los primeros católicos que hablan precisamente de la sucesión Apostólica, estos grandes pastores, reconocidos por toda la iglesia post-apostólica, y muchos de los cuales dieron su vida por Jesucristo, creían firmemente que los obispos de la Iglesia Católica sucedían a los Apóstoles de Jesús en el oficio de guiar la Iglesia con autoridad. En otras palabras, si hoy en día un cristiano dice que en el evangelio “no hay huella” de la doctrina de la sucesión apostólica, con el presente artículo quedará en claro lo que pensaban otros cristianos, con la diferencia que estos últimos (los Padres de la Iglesia) están cronológicamente mucho más cerca de Jesús y los Apóstoles que cualquiera de nosotros:

CARTA DE CLEMENTE ROMANO A LA IGLESIA DE CORINTO (alrededor del año 97).

        “Los apóstoles fueron constituidos por el Señor Jesucristo los predicadores del Evangelio para nosotros; Jesucristo fue enviado por Dios. Así, pues, Cristo fue enviado por Dios, los apóstoles por Cristo y ambas cosas se realizaron ordenadamente, según la voluntad de Dios. Así, pues, recibido el mandato los apóstoles y plenamente asegurados por la resurrección del Señor Jesucristo y confirmados en la fe por la palabra de Dios, salieron con la plena seguridad que les infundió el Espíritu Santo, dando la buena noticia de que el reino de Dios estaba para llegar. Y así, a medida que iban predicando por lugares y ciudades, iban estableciendo – después de probarlos en el espíritu – a las primicias de ellos, como obispos y diáconos de los que habían de creer.  

        Y también nuestros apóstoles conocieron por nuestro Señor Jesucristo que habría de haber emulación por el episcopado. Por esta razón, con pleno conocimiento de lo que había de suceder, establecieron a los susodichos y dieron para lo sucesivo la norma de que cuando ellos murieran, otros hombres probados les sucedieran (griego “diadéksontai” = “suceder”, n.d.r.) en le ministerio. Así pues, los hombres establecidos por ellos, o después por otros varones eximios, en comunidad de sentimientos con toda la Iglesia; hombres que han servido irreprochablemente al rebaño de Cristo con espíritu de humildad, pacífica y desinteresadamente; que durante mucho tiempo han gozado de la aprobación de todos; estos hombres creemos que en justicia no pueden ser apartados de su ministerio”.

 

        2.- CARTA DE IGNACIO DE ANTIOQUIA A LOS TRALIANOS (alrededor del año 110).

        “Ciertamente, cuando os sometéis al obispo como os someteríais a Jesucristo, entonces resulta claro que estáis viviendo no al modo puramente humano, sino como lo quiere Jesucristo, quien murió por nosotros, para que por medio de la fe en su muerte podáis escapar a la muerte. Es necesario, por lo tanto – y eso es lo que ya hacéis – que no hagáis nada sin el obispo, y que seáis sumisos también al presbiterio, como si fuera a los apóstoles de Jesús, nuestra esperanza, en el cual seremos encontrados, supuesto que vivamos con Él […].

        Del mismo modo, que todos respeten a los diáconos como respetarían a Jesucristo, del mismo modo como respetan al obispo como una imagen del Padre, y a los presbíteros como al consejo de Dios y al colegio de los Apóstoles. Sin estos, no puede llamarse “iglesia”. Estoy seguro que entenderéis estas cosas, ya que he recibido el buen ejemplo de vuestro amor, y lo tengo conmigo en la persona de vuestro obispo []”.

 

        3.- CARTA DE IGNACIO DE ANTIOQUIA A LOS FILADELFOS (alrededor del año 110).

        “Por cierto, los que pertenecen a Dios y a Jesucristo, esos están con el obispo. Y los que se arrepienten y retornan a la unidad de la iglesia – ellos también serán de Dios, y vivirán según Jesucristo. Que nadie se equivoque, hermanos amados: si alguien sigue a un cismático, ese tal no entrará en el Reino de Dios. […] Sed solícitos de tener una sola eucaristía, de modo que cualquier cosa que hagáis esté en consonancia con Dios: porque hay una sola Carne de Nuestro Señor Jesucristo, y un solo cáliz en unión con su Sangre; hay un solo altar, al modo como hay un solo obispo con sus presbíteros y mis compañeros servidores, los diáconos”.

        4.- CARTA DE IGNACIO DE ANTIOQUIA A LOS DE SMIRNA (alrededor del año 110).

        “Porque vosotros todos debéis seguir al obispo, al modo como Jesucristo sigue al Padre, y debéis seguir a los presbíteros como seguiríais a los Apóstoles. […] Que nadie haga ninguna cosa que sea importante con respecto a la iglesia sin el obispo. Considerar como válida sólo aquella eucaristía que es celebrada por el obispo, o por uno que él designe. Que la gente se reúna allí donde haya un obispo, al modo como la iglesia católica está allí donde está Cristo. Y tampoco se permite bautizar sin el obispo, o celebrar el ágape; pero cualquier cosa que el obispo apruebe, eso será grato a Dios, de modo que lo que se haga así será válido y seguro.”

Termino este articulo con estos puntos desarrollados por San Roberto Bellarmine, 1542-1621, Doctor de la Iglesia y Cardenal

 1. El Nombre de la Iglesia, Católica, universal, y mundial, y no confinada a una nación o gente  en particular.
 2. Antiguedad, en trazar sus ancestros directamente a Jesucristo.
 3. Constante Duración, en durar substancialmente sin cambios por muchos siglos. 2.

 4. Extensiva, en el número de sus fieles.
 5. Sucesión Episcopal, de sus Obispos desde los primeros Apóstoles en la Ultima Cena a la  jerarquía presente.
 6. Acuerdo Doctrinal, de su doctrina con las enseñanzas de la Iglesia antigua.
 7. Unión, de sus miembros entre ellos mismos, y con la cabeza visible, el Pontífice Romano.
 8. Santidad, de doctrina en reflejar la santidad de DIOS.
 9. Eficacia, de doctrina en su poder the santificar creyentes e inspirarlos a grandes logros morales.
10. Santidad de Vida, de los escritores y defensores representantes de la Iglesia.
11. La gloria de Milagros, trabajados en la Iglesia y bajo el auspicio de la Iglesia.
12. El don de Profesía encontrado entre los santos de la Iglesia y sus portavoces.
13. La Oposición que la Iglesia levanta entre aquellos que la atacan en los mismos terrenos en los cuales Cristo fuera atacado por Sus enemigos.
14. El Triste Fin, de aquellos que luchan contra ella.
15. La Paz Temporal y Felicidad Terrenal de aquellos que viven de acuerdo a las enseñanzas de la Iglesia y que defienden sus intereses.

Bendiciones en Cristo y María Santísima Theotokos

Preguntas:

1.     ¿Características de la Iglesia?

2.     ¿Por qué es una?

3.     ¿Por qué es santa?

4.     ¿Por qué es Apostólica?

5.     ¿Por qué es romana?

6.     ¿Cuáles son los tres vínculos de unidad?

7.     ¿Qué es la herejía Arriana?

8.     ¿Qué es el pelagianismo?

9.     ¿Qué quiere decir católico?

10.  ¿Cristianos o católicos?

11.  ¿Desde cuándo se llama Iglesia Católica?

12.  ¿Quién sucedió a los Apóstoles?

Fuentes:

La Sagrada Biblia

Catecismo de la Iglesia

http://apologeticauniversal.verdaderafe.org/2009/10/fundacion-de-la-iglesia-catolica.html

http://corazones.org/diccionario/catolico.htm

http://www.mercaba.org/FICHAS/Apologetica.org/sucesion-padres.htm

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio