Cuando escuchamos la frase: Inmaculada Concepción se nos pueden venir a la mente muchas ideas, incluso que se refiera al nacimiento de Cristo, pero vamos a tratar en este pequeño artículo, de poder llegar al católico en un lenguaje sencillo sobre la hermosura de este dogma.
Partiendo de su definición el 8 de diciembre por parte de Pio IX en la Carta Apostólica Ineffabilis Deus http://www.mercaba.org/MAGISTERIO/ineffabilis_deus.htm:
Declaramos, afirmamos y definimos que ha sido revelada por Dios, y de consiguiente, qué debe ser creída firme y constantemente por todos los fieles, la doctrina que sostiene que la santísima Virgen María fue preservada inmune de toda mancha de culpa original, en el primer instante de su concepción, por singular gracia y privilegio de Dios omnipotente, en atención a los méritos de Jesucristo, salvador del género humano.
Para entender esto partimos de varios conceptos teológicos básicos:
1.) Dios actua según su poder
2.) Dios nos prepara para cada misión
3.) Dios no habita en el pecado
4.) Dios siempre cumple su plan de salvación
Con estas premisas básicas podemos trazar una línea para descubrir el dogma de la Inmaculada Concepción:
Planteamiento
a.) Dios decide que su Hijo venga a salvarnos y sea uno como nosotros.
b.) Para hacerlo necesita darle una madre terrenal
Problema
c.) Por el pecado original esa madre le transmitiría pecado a Jesús
d.) Jesús no puede cohabitar con el pecado (concepto 3)
e.) La redención de nuestros pecados sólo se dará cuando Jesús muera
Solución
f.) Que Dios intervenga para que la madre no herede pecado y obtenga una gracia única (concepto 1)
g.) Que Dios haga esta excepción en virtud de la misión que le da a esta mujer: engendrar en su vientre a Jesús (concepto 2)
h.) Que lo ejecute teniendo presente que también María va a ser redimida por Jesús pero antes de su muerte. (concepto 4)
i.) Que decida hacerlo justo desde el primer instante de su vida para que nunca hubiera estado el pecado presente
Entendiendo lo anterior ahora sí podemos volver a leer el dogma:
- la santísima Virgen María fue preservada inmune de toda mancha de culpa original
- en el primer instante de su concepción
- por singular gracia y privilegio de Dios omnipotente
- en atención a los méritos de Jesucristo, salvador del género humano
No es de este artículo analizar el soporte bíblico ni la enseñanza de los Padres de la Iglesia, sólo llegar al católico en palabras sencillas sobre cómo entender la Inmaculada Concepción.