Por Anwar Tapias Lakatt
Cada vez que llega Navidad, aparece un personaje muy popular, vestido de rojo, con barba blanca, cara de abuelo, gordo y que tira de un trineo repartiendo regalos. Y uno se pregunta ¿y este de dónde salió? ¿Qué tiene que ver con la Navidad? Se dice que es una transformación de San Nicolás, pero ¿Cómo se dio? ¿Sabías que los protestantes tienen mucho que ver?
El verdadero San Nicolás fue un obispo que vivió entre el siglo III y IV, en la ciudad de Myra, en la actual Turquía. Es popular su mención en el Concilio de Nicea, en el que le habría dado una bofetada a Arrio por negar la divinidad de Cristo, pero se pone en duda debido a que no aparece en las actas que incluyen a los obispos participantes en el Concilio[1], pero ese momento ha quedado plasmado hasta en el arte. Otras versiones dicen que debido al incidente le retiraron sus insignias y lo metieron preso, razón por la cual no aparece en las actas, pero el Señor obró milagrosamente y lo puso en libertad.
San Nicolás es de los santos más venerados y queridos por los latinos y los ortodoxos, aunque celebren su días en fechas diferentes (6 de diciembre y 19 de diciembre). Se le atribuyen muchos milagros, sobre todo relacionados con niños, por lo que se le considera su guardián y protector, por la historia que cuenta sobre cómo ayudó a un padre que pensaba entregar a sus tres hijas en prostitución debido a que no tenía para pagar la dote. Se cuenta que una noche entró San Nicolás y arrojó bolsas de oro por la ventana, con lo que el hombre pudo salvar a su primera hija[2], o que cuando iba a arrojar la tercera bolsa de oro encontró la ventana cerrada y debió arrojarla por la chimenea, la cual cayó en una media que estaba secándose. Otra versión cuenta que resucitó a tres niños que habían sido asesinados. También se le considera patrono de los marineros, sobre todo en Oriente, algo que se mantuvo también en Europa. Es un santo cuya fama se extendió por muchas partes, a su nombre estaban 2.137 Iglesias dedicadas antes del año 1.500 en Alemania, Francia y Países Bajos[3]. Y no solo eso, los vikingos dedicaron su Catedral en Groenlandia a san Nicolás; Cristobal Colón llamó San Nicolás, un puerto descubierto en santo Domingo en 1492; y los españoles construyeron un fuerte en Jacksonville llamado San Nicolás[4]
Hay muchas Iglesias dedicadas a San Nicolás alrededor del mundo.
En Italia su devoción se da por el hecho que sus reliquias fueron robadas de Myra y llevadas a Bari, en el siglo XI cuando los musulmanes invadieron Asia Menor. Incluso recientemente el Vaticano trasladó una reliquia de San Nicolás a Rusia, luego del encuentro ecumenico entre el Papa Francisco y el Patriarca Kiril. Se estima que 2.5 millones de cristianos rusos veneraron la reliquia de San Nicolás
Iglesia en Praga Iglesia en Valencia Iglesia en Montenegro
¿Pero cómo se transformó en Santa Claus?
La Reforma Protestante
La mal llamada reforma protestante tuvo mucho que ver en la transformación de San Nicolás, pues siendo un santo muy querido, a la hora de rechazar toda mediación y la intercesión de los santos, también San Nicolás fue afectado. En los países predominantemente protestantes, cambiaron la historia de San Nicolás, y le dieron nuevas características, incluso nuevos nombres como Padre Navidad o Viejo Navidad.
Martín Lutero quiso tomar elementos católicos de Navidad. Creó un personaje llamado Christkindl, una especie de ángel como Cristo niño que traía regalos de Navidad, con el fin de reducir la importancia de San Nicolás[5]. Cuando los emigrantes alemanes llegaron a Estados Unidos, lo llamaron Kriss Kringle.
También había otros personajes como Padre Navidad o Viejo Navidad. Las representaciones artísticas de esta época dan cuenta de un hombre viejo, de barba, con ramas en su cabeza. Sobre todo en Inglaterra se representaba al viejo Navidad, sin relación a niños o a regalos, lo que sucederá después cuando la fama de Santa Claus llegó a Inglaterra, y la figura del Padre Navidad tomó su forma actual en el período Victorino. Es tan claro para los ingleses el nombre de Padre Navidad, que hasta reclaman que no se le llame Santa Claus por ser un americanismo[6].
Representaciones actuales del Padre Navidad
La leyenda holandesa
A pesar que la reforma protestante logró menguar la devoción a San Nicolás, en Holanda se mantuvo a nivel callejero, a quien llamaban popularmente Sinterklaas. De la popular historia en que habría resucitado a tres niños degollados por un carnicero, surge que al asesino lo habría atado al burro y obligado a acompañarlo disuadiendo a los niños a que se portaran bien y asustando a los que se portaban mal[7]. Incluso, la leyenda cuenta que Sinterklaas venía todos los años desde Madrid en Barco hasta Holanda. Hoy día todavía así lo celebran los holandeses.
La forma en que se representa a Sinterklaas lo deja con su báculo de Obispo
Los holandeses emigraron a Estados Unidos y trajeron su versión de San Nicolás, pero fueron muy esporádicas las referencias documentales.
Podríamos mencionar 2:
- Una cuenta de pastel de 1675 en Albania (Nueva Holanda) que menciona la compra de unos presentes Sinterklaas, para una celebración.[8]
- Una publicación de 1773 en el Rivingston Gazzeter, un diario local que expresaba:
“El lunes pasado se celebró el aniversario de San Nicolás, también llamado Santa Claus, en el Salón Protestante, del señor Waldron; donde un gran número de hijos de ese antiguo santo celebraron el día con gran alegría y festividad”[9]
La referencia es interesante porque ya muestra como equivalente el nombre de Santa Claus o San Nicolás, en donde el proceso de afianzamiento de las costumbres holandesas va calando y ganando terreno.
San Nicolás en Norteamérica
En Estados Unidos se empiezan a desarrollar sociedades históricas, según cada grupo de emigrantes que llegaban. Un líder llamado Jhon Pintard, creó la Sociedad Histórica de New York en 1804, antigua Nueva Amsterdam, poblada de colonos holandeses, la creó con el fin de contrarrestar la influencia británica. Decidió colocar a San Nicolás como patrono de la sociedad, y solicitó un dibujo al artista Alexander Anderson, quien lo dibujo en 1810, para el primer aniversario el 6 de diciembre, día de San Nicolás, con una imagen de tipo religiosa, pero ya con la representación de dar regalos a los niños.
Sería Washington Irving, miembro de la sociedad quien retrata en su obra Knickerbocker’s History of New York, una figura de San Nicolás que introduciría el verdadero cambio, obra que presentó el 6 de diciembre de 1809. En su historia va air mostrando nuevas cualidades de San Nicolás, sobre todo en el libro II de su obra. En el capítulo II lo muestra con sombrero de ala ancha, pantalón de copa y una pipa, viniendo en un barco proveniente de Holanda. En el capítulo V se aparece en un sueño volando en su vagón sobre la cima de los árboles. En el capítulo 9 se retratará que el santo lleva regalos a los niños, incluso dejándolos por la chimenea[10].
Esta narrativa popular gustó mucho y empezó el verdadero cambio, pues ya San Nicolás se identificaba con el holandés Sinterklaas, que termina como santa Claus.
Posteriormente, otro miembro de la sociedad, Clement Moore, un profesor de lenguas bíblicas en el Seminario teológico episcopal de New York, escribió un poema llamado Una visita de San Nicolás[11], en 1822, en el que sigue desarrollando la transformación de San Nicolás. Entre las novedades del poema de Moore podemos destacar:
- La llegada de San Nicolás era para Navidad, y no ya el 6 de diciembre
- Se reafirma la tradición de dejarle medias junto a la chimenea
- Menciona el trineo tirado por 8 renos y da sus nombres
- El trineo lleva muchos juguetes
- Lo describe con mejillas rosadas y barba blanca, cara ancha y panza
Este poema ya va mostrando la transformación paulatina que fue teniendo San Nicolás, y que lo fue alejando de su ser religioso para irlo transformando según la visión de los miembros de la Sociedad Histórica de New York. Aun no se han dedicado a transformar sus vestimentas pero faltará poco hacerlo.
Moore logró ya mostrar 8 renos, pero ¿en qué momento se pasó del caballo blanco que mencionaba la tradición holandesa, y que Irving mostró en su historia a 8 renos? Al parecer, en 1821 había aparecido otro poema llamado Los niños amigos, publicado en Broadway, y en el que en su primera estrofa decía:
Viejo Santa Claus con mucho deleite,
Su reno conduce esta noche helada,
Más chimeneas y pistas de nieve,
Para traerle sus regalos anuales.
Aquí se da el paso del caballo al reno. Moore lo que hará será agregar 7 más para que fueran ocho.
Llegaría 1939, época de la gran depresión, y el Almacén Montgomery Wards queriendo lograr impactar en los niños, pide al publicista de la tienda, Robert May, crear su propio libro de niños para promocionar su festivo anual, y creó la historia de un reno de nariz roja llamado Rodofo (Rudolph en inglés), cuya nariz brillaba en la oscuridad, el cual Santa Claus pondría en su grupo de renos[12], convirtiéndose en el noveno reno, ya Moore había creado que fueran ocho. Fue un éxito y ese año vendieron más de dos millones de copias.
La fuerza de un dibujo
Los dibujos sobre San Nicolás, o su contracción holandesa Santa Claus fueron definiendo aún más su imagen actual. El nombre más mencionado es Tomas Nast, un dibujante que a través de varias publicaciones fue moldeando la imagen de San Nicolás a lo que es hoy día.
Su primera publicación fue en 1863 en el semanario Harper, en el cual nos muestra un Santa Claus propiamente americano con un vestido alusivo a la bandera americana, y niños abriendo sus juguetes. Es una imagen de tinte político[13], pues muestra a los soldados un muñeco del presidente Jefferson Davis.
Dentro del semanario se puede observar otra imagen en donde Santa está dejando regalos a los niños mientras duermen
Al año siguiente aparece ya un Santa Claus con la chaqueta roja, mas no los pantalones, halado por trineos pero sin juguetes en él.
Thomas Nast siguió puliendo su imagen de Santa Claus, y ya para 1881 nos trae un Santa más parecido a la versión actual, con juguetes y su popular pipa, y la barba blanca.
Ya para 1902 se nos presenta el primer Santa con su vestido rojo tradicional, en la versión de un cuento llamado Puck, del escritor Frank Nankivell.
En la primera década del siglo XX, el George Lorimer, editor del Saturday Evening Post, ubicó a dos de los mejores dibujantes de la época J.C. Leyendecker y Norman Rockwell, para representar a Santa Claus[14]. Destaco dos imágenes, una de 1922 de Rockwell, de un santa muy humanizado, que no solo trae regalos sino que los hace. Otra de Leyendecker, ya con las características propias de su vestido rojo trayendo regalos, todo esto antes que la Coca Cola entrara en acción.
Aparece Coca Cola
Coca Cola entra en escena en la década de los 30, pero ya las características de Santa Claus están afianzadas. Será ahora el momento de aparecer en escena Haddon Sundblom, artista que debido a la cantidad de trabajos logró impactar y grabar en la mente de los estadounidenses, la figura de Santa Claus.
Lo que Coca Cola sí hizo fue ayudar a mostrar a Santa como amigable y juguetón como ellos mismos expresan en su web[15], y es tal vez esto lo que ha llevado a pensar que la versión actual de Santa Claus es producto de la Coca Cola.
Un producto a nivel mundial y comercializado en tantos países, proveniente de un país tan grande han expandido la figura de Santa Claus y la han introducido comercialmente en todo el mundo.
El Cine amplia la imagen de Santa Claus
Hollywood ha generado muchas películas navideñas en las que el personaje central es Santa Claus, como Santa Clausula 1, 2 y 3; El Expreso Polar, ¿Y dónde está Santa? Por mencionar algunas. Esto ha hecho que Santa sea un personaje conocido a nivel mundial, eliminando cualquier referencia cristiana a San Nicolás, el obispo.
A pesar de la influencia estadounidense, los católicos debemos mantener la devoción sana para este santo y reconocer sus virtudes cristianas a la luz del Evangelio. Si en cada país se desarrollaron tradiciones y costumbres en torno a la figura de San Nicolás, que no correspondan a la vida del santo tampoco podemos querer erradicar esas versiones que ya arraigaron en el imaginario de cada pueblo. Nuestra labor es honrar e imitar a San Nicolás, porque si San Nicolás no viene en trineo del polo Norte, tampoco llega a Holanda desde Madrid como la versión holandesa, pero no veo a ninguno rechazando la segunda pero sí la primera.
Santa Claus es un producto americano querido por ellos, nuestra preocupación debe ser imitar al verdadero san Nicolás.
San Nicolás, ruega por nosotros